opinión

Tribuna Pública

Francisco Javier Copeño Castro

Hoy, primeramente queremos felicitar a todos los americanistas que leen El Diario de la Tarde, por el campeonato logrado por su equipo, principalmente a nuestro director general Julio César Zubillaga Ríos, que estará que no cabe de gusto por el triunfo del equipo de sus amores; y que aunque digan lo contrario hubo un momento en que prácticamente lloraban porque veían a su equipo caer ante un Cruz Azul que a diferencia del primer partido, hoy salió sin suerte y por el contrario a quien le sonrió la diosa fortuna fue a Moisés Muñoz quien con un cabezazo y una mala patada del defensa azul, la pelota fue a dar al fondo de la red y con eso se fueron al alargue que a la postre los llevó a la tanda de penaltis donde nuevamente para fortuna del portero azulcrema, la suerte le volvió a sonreír y con el pie paró el tiro del jugador del Cruz Azul con lo que prácticamente se selló la suerte de  ese equipo y el resultado América campeón. ¡Saludos a la afición azulcrema desde este humilde espacio y felicidades nuevamente por este campeonato! Por cierto, habían pasado varios entrenadores y no habían podido lograr ser campeones, pero llegó un piojito y contagió a las águilas con lo que se ganaron el mote de águilas piojosas, y con el Piojo por delante hoy lograron alegría para toda su afición logrando este campeonato. ¡Enhorabuena! Ahora, pasándonos a algo serio… jajajajajajajajajaja no es cierto, quisimos decir a nuestros comentarios de siempre… les comentaremos que la calle de Salazar frente a la Central Camionera “Estrella Blanca” y finalmente será dejada como estaba y no como la querían hacer, colocando algunas jardineras por el lado de la central y una banqueta corredor por el lado de los taqueros del mercado municipal. Esto, por la presión ejercida por comerciantes y transportistas que amagaban con hacer bloqueos de calles, sino quitaban las jardineras y la guarnición para la mega banqueta que estaban construyendo, que a decir de los comerciantes era para la colocación de más ambulantes, los que por cierto siempre existirán porque le conviene a los gobiernos municipales, puesto que de ellos recaban dinero que bien puede entrar o no a las arcas municipales.