Tribuna Pública

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Francisco Javier Copeño Castro

 

Con el inicio de las comparecencias de los funcionarios municipales ante el Cabildo, las autoridades municipales, no se deberán quedar con lo que les lleguen a decir, porque o más probable con contadas excepciones les estarán mintiendo. Lo más sano es que después de escucharlos se designe a una comisión de verificación de lo dicho por los comparecientes. Inclusive en aquellos lugares o dependencias en donde existe quejas de los trabajadores, porque solo puede estar pasando una de dos cosas, la primera es que en verdad dichos acusados estén realizando todo lo que se les señala y dos, que no quieren adaptarse a los nuevos tiempos de trabajo y quieran seguir echando la weba como antes lo hacían. Por tal motivo y razón, se deben investigar las cosas y de resultar ciertas una cosa o la otra, que se finquen responsabilidades y no baste con la separación del cargo que dicha gente venía desempeñando. Por lo que toca al mercado municipal, existen evidencias claras y concisas de que las cosas no andan del todo bien, por lo que se debe investigar quién o quiénes han otorgado permisos para construcción en áreas de uso común o de áreas federales y que inclusive vayan a parar a la cárcel por corruptos. Solo basta venir y darse una vuelta por todas las áreas del mercado, y preguntarle a la gente quiénes y cómo se han apropiado de espacios al amparo de líderes corruptos que concretan al cien por ciento el dicho que dice que “perro que traga huevos aunque le quemen el hocico nunca dejará de hacerlo”. Nada más que deben tener cuidado, porque las cosas ya no son como antes…. ¡Aguas! Pero eso sí, el alcalde Silviano Mendiola Pérez no debe creer todo lo que le digan y se confíe, porque Judas hay en todos lados y mientras les dé cabida y chamba le dirán que todo lo que hace está bien, pero debe cerciorarse de que lo que le digan es verdad y lo debe constatar personalmente, para no cometer los mismos errores que sus antecesores. Por eso, cuando se decida visitar al mercado, deberá ir con prácticamente dos o tres días de disposición de trabajo, porque la verdad no es poca cosa lidiar con los asuntos de dicho centro de abasto. Pero antes de ir a dicho centro de abasto, debe solicitar toda la información de dicho lugar y de los comerciantes para saber que terreno pisará, de lo contrario las cosas no serán como las piensa, y sobre todo ir con la idea de buscar soluciones juntos y no de manera unilateral. ¡Hasta la próxima y salud!